Año 2017

“Solo a Dios serviremos y a su voz obedeceremos”

Josué 24:11-27

Dios es paciente para contigo, aún   hay cumplimientos delante de ti, aun puedes vivir en la plenitud que diseñó para que desarrolles sus planes para la humanidad. Pero necesitas tomar una decisión. Dios no va a cambiar sus planes con la generación emergente debido a tu terquedad o tus debilidades. Mientras contribuyas a que la generación emergente se prepare para ministrar a la próxima generación, Dios hará maravillas en ti y a través de ti. Pero si eres un mal ejemplo para esta generación emergente, él no va a dejar que la generación se pierda, sino buscará en otros los pastores, maestros, mentores y líderes para que sanen las heridas de los niños del desierto, para que den una visión  correcta de Dios y su poder a los nacidos en el tiempo de conquista. Por eso debes tomar la decisión conmigo y declarar “Solo a Dios serviremos y a su voz obedeceremos”

Ahora bien, permíteme explicarte que compromisos implican la palabra para el 2017 “Solo a Dios serviremos y a su voz obedeceremos”

Compromiso #1

Una vida de reverencia (Josué 24:14)

El concepto de vida de reverencia surge de la orden “temed a Jehová” que el pueblo recibe luego de afirmar su decisión de servir solo a Dios. Temer, yare en hebreo cuando se usa con relación a una persona de alto rango, connota “temor reverente»” Es más que simple temor; es la actitud con que una persona reconoce el poder y la condición de la persona a la que se reverencia y se le rinde el debido respeto[1]. El diccionario RAE define reverencia como respeto o veneración que tiene alguien a otra persona e inclinación del cuerpo en señal de respeto o veneración[2].

La vida de reverencia significa que el servicio no debe hacerse a la ligera, como una tarea cualquiera. Sino con respeto reconociendo a la persona que se le sirve. La reverencia es fruto del entendimiento de la grandeza de la persona a la que se sirve y ante la cual se está presente. La puntualidad y fidelidad en la asistencia a los servicios de la iglesia como al GPO, la actitud de respeto ante la exposición de la Palabra, el fervor en la adoración y el cuidado de los bienes de la iglesia son evidencias de una vida de reverencia que lleva a la plenitud.

Compromiso #2

Una vida de Integridad (Josué 24:14)

La demanda de una vida de integridad se evidencia en la frase “servidlo con integridad y verdad” ambas palabras tienen un significado similar en el hebreo. Integridad, en hebreo tamin, significa perfecto, sin mancha, sincero, entero, completo y cabal. Mientras que verdad, en hebreo emet,  significa derecho, fidelidad. De las noventa y un veces que integridad aparece en el antiguo testamento, cincuenta de estos se encuentran en pasajes relacionados con la ofrenda. Por tanto la integridad está directamente relacionada con la fidelidad en los diezmos y ofrendas que se entregan a Dios.

El pueblo de Israel faltó a la integridad porque aunque decían servir solo a Dios, aún tenían ídolos a los cuales veneraban. Entonces servían a Dios en los que les parecía correcto, pero su corazón no estaba totalmente entregado a él.

Compromiso #3

Una vida sacerdotal con la familia (Josué 24:15)

Uno de los elementos claves de la plenitud, tiene que ver con la certeza de haber hecho lo suficiente para que la familia decida servir a Dios. Aunque cada miembro de la familia deberá tomar su decisión personal de servir a Dios, el creyente debe ministrar a la familia y presentarse delante de Dios como un sacerdote en intercesión por los suyos. Así también, es necesario vivir de tal manera que sus familiares quieran servir a Dios no solo por escuchar la predicación sino por los hechos del creyente.

Compromiso #4

Una vida de obediencia  (Josué 24:24)

Durante el periodo de conquista todo el pueblo del Israel se comportó como un ejército a las órdenes de un general. Fueron siete años de batallas continuas. En todo el tiempo el pueblo escuchó la voz de Josué y le obedeció, pero no escucharon la voz de Dios. Después de siete años de experimentar la Gloria de Dios a favor de ellos todavía seguían con sus ídolos. ¿Cómo es esto posible? Pues ellos no tenían una relación personal con Dios, sino a través de Josué. Para cambiar esto, el líder les escribe la ley para que puedan leerla y les coloca recordatorio para que no olviden cual es la voluntad de Dios y la obedezcan

Quienes deseemos ser plenos para ministrar a la generación emergente y alcanzar la totalidad de las promesas de Dios necesitamos a disciplinarnos en la práctica del estudio de la Palabra de Dios y la vida de devoción de manera a escuchar la voz de Dios para obedecerla.

Compromiso #5

Una vida de introspección (Josué 24:23)

Introspección según el diccionario de la RAE es Mirada interior que se dirige a los propios actos o estados de ánimo. Es decir es el tiempo donde el creyente se mira así mismo, a la luz de la Biblia para conocer lo que está mal en su vida, de manera a cambiarlo.

La necesidad de introspección es evidente en el grupo confrontado por Josué, pues de otra manera no es posible entender como pueden practicar un pecado tan terrible como la adoración de ídolos. Un pecado tan grave solo se poder practicar sin culpa, luego de un periodo largo de alejamiento de Dios, el cual por lo general se produce poco a poco.  Por eso es necesario que el creyente haga una pausa en su rutina y aparte tiempo para el ayuno y la meditación para analizare a si mismo teniendo como regla de conducta a la Biblia. Esto mismo hacía el salmista cuando escribió:

“Examíname,  Dios,  y conoce mi corazón;  pruébame y conoce mis pensamientos” (Salmos 139:23).

 

Aplicación

1. ¿Sobre cuál de los cinco compromisos deberás trabajar más para ser un creyente pleno?
2. Señala algunas faltas de reverencia que debieras evitar cometer
3. ¿Cómo puedes mejorar tu sacerdocio para con tu familia?
4. ¿Qué harás en el 2017 para escuchar y obedecer la voz de Dios?

[1] Diccionario Expositivo de Palabras del Antiguo Testamento (Editorial Caribe, 1999. Versión digital para E-Sword 10.4, 2014), bajo Josue  24:14

[2] Real Academia Española. “Diccionario de la  Lengua Española”. http://dle.rae.es/?id=WNeLaaJ (Último acceso el 1 de enero  del 2017).